jueves, enero 12, 2006

LUZ DE LAS NACIONES

Isaías 49:6 “… Poco es para mí que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures el remanente de Israel; también te di por luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta lo postrero de la tierra”. El inicio de este año 2006 estará marcado por lo que Dios tiene que decirnos. No será marcado por donde iremos de vacaciones, si es que vamos. No será marcado por los planes que tengo para mí, para mi familia, para mi trabajo, o para mi ministerio. La voluntad de Dios es que hagamos su voluntad. Pero antes debemos conocerle a Él. De lo contrario obedeceremos órdenes de segunda mano. Obedeceremos solo porque alguien nos dijo lo que teníamos que hacer. Nos olvidamos que es Dios mismo el interesado en nosotros. Nuestra visión no es una cosa por alcanzar. Nuestra visión es Jesucristo. Y esa visión ya nos alcanzó a nosotros. Jesús vino y se quedó entre nosotros. La visión en nosotros es Cristo. Es la persona de Cristo. Es su voluntad en nosotros. Es la manifestación de su gracia en nosotros. Es su luz brillando en nosotros. Él vino a mostrarnos su reino, al que ahora nosotros pertenecemos. En su reino hay unidad, entonces debemos unirnos, debemos ser uno. Debemos amarnos los unos a los otros, pues en eso conocerá la gente que somos sus discípulos : “si tuviésemos amor los unos por los otros”. La unidad es producto del amor. Dios es amor. Dios es unidad. Debemos además vivir en santidad, pues “sin santidad, nadie verá al Señor”. Si queremos verle, si queremos hablar con Él, si queremos andar con Él, entonces la santidad es un requisito, no es una opción. No basta nuestra buena intención, es necesaria nuestra determinación de apartarnos y consagrarnos solo para Él. Vivir en santidad tiene un costo. Puede ser nuestra familia, nuestros amigos, nuestro trabajo, nuestro entorno de vida. Pero no debe preocuparnos. Jesús sigue intercediendo por nosotros ante el Padre, su oración sigue siendo la misma “Padre no te ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal”. Si tenemos clara nuestra visión, si permanecemos unidos y si vivimos en santidad, tenga la seguridad que seremos “Luz de las naciones”. Con amor, Templo Corbán

1 Comments:

Blogger Adoradora said...

Si estamos unidos el Señor nos escucha y que mejor estar unidos en santidad como tbm obedeciendo por amor al Señor....
Predicamos mucho con nuestro accionar.
Salu2...
Dios les bendiga

Gudbai*

14 enero, 2006 13:59  

Publicar un comentario

<< Home