martes, diciembre 04, 2007

HÁGASE CONMIGO CONFORME A TU PALABRA

Lucas 1:30 al 38 30 Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. 31 Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. 32 Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.
34 Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón.
35 Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios. 36 Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril; 37 porque nada hay imposible para Dios. 38 Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia. Introducción: -El deseo de Dios de habitar entre nosotros se cumplió cuando Dios encontró a una mujer como María. -Una mujer que tuvo la osadía de decirle si a Dios en un momento crucial en su vida, pues se arriesgaba a perderlo todo, incluso su vida. -Pero María le creyó a Dios. Creer es confiar en Él. -Cuando alguien recibe una Palabra de Dios, al igual que María tiene dos opciones o la acepta o la desecha. -La actitud de María fue la que agradó a Dios. ella halló gracia a los ojos de Dios. -Hoy tu puedes hallar gracia a los ojos de Dios, pues Dios sigue dando dones a los hombres. -Acepta lo que Dios tiene para ti. -“Hágase conmigo conforme a tu palabra”. -¿Podremos decir lo mismo nosotros?. -¿En este siglo tan convulsionado en que estamos viviendo? -Hoy hay una Palabra de Dios para cada uno de nosotros. -Cada hombre, cada mujer está en los ojos de Dios. -Dios ha hallado gracia en nosotros a través de Jesucristo. -Jesús, a través de su muerte, nos justificó delante del Padre. -Nadie diga entonces: “Dios jamás hallará gracia en mi”. Nosotros no tenemos nada que pueda agradar al Padre, salvo nuestra actitud. -Solo nuestra actitud. Todo lo demás lo hará Él mismo en nosotros. Bosquejo: 1. La necesidad de Dios a. Mostrar su amor b. Darse a conocer como Padre c. Habitar entre nosotros 2. La necesidad de una mujer a. Para cumplir el propósito de Dios b. María no alquila su vientre ni lo hace por miedo c. María obedece y acata la voluntad de Dios 3. Si es necesario se cumplirá a. Dios cumple lo planificado antes de la eternidad b. Dios cumple el venir a vivir entre nosotros c. Dios sigue necesitando mujeres como María, como Dorcas, como Mercedes, como Minerva, como Sonia, como Jacqueline, como tú, dispuestas a decir “Hágase conmigo conforme a tu Palabra”. Conclusión: -Dios sigue respondiendo nuestras peticiones para que a través de ellas él pueda cumplir su voluntad. Pues Él contestará todas nuestras peticiones siempre y cuando estemos en su voluntad. -Dios siempre ha querido estar entre nosotros y a través de una mujer llamada María cumple su propio designio. -Pero lo hermoso de la historia es que su hijo, aquel hijo no esperado por María, pero que tantas satisfacciones como hijo pudo darle, un día ella tuvo que sufrir la angustia de verlo desangrar en una cruenta cruz, aunque sabía el propósito de Dios, su corazón de madre fue traspasado. -¿Cuántas madres están dispuestas a ofrendar a su hijo y dejar que Dios cumpla su propósito en él?. María lo hizo. -¿Cuántas madres están dispuestas a despojarse de lo mas preciado solo por obedecer y someterse a la voluntad divina?. María lo hizo. -¿Puedes decirle a Dios “Hágase conmigo conforme a tu Palabra?. -Hay cosas que no nos gustaría que pasasen, pero pasan. Y no porque a Dios le guste el sufrimiento, sino porque “es necesario”. -¿Estás dispuesta a entregar a tu hijo a Dios, para que Él haga conforme a su voluntad?. Recuerda “es necesario”. -Era necesario que Jesús naciese de una mujer como María, pero era necesario que María pasase el sufrimiento de ver partir a su hijo. -¿Quieres hoy hacer un pacto con Dios? El no pone condiciones, las pones tú. ¿Qué le prometerás a Dios como madre?
Con mucho amor,
Templo de Adoradores CORBÁN